13 de julio de 2025

Cráteres Clásicos al Terminador: Un Viaje Visual por la Luna Creciente


 La imagen que acompaña esta entrada muestra una impresionante franja lunar capturada el 2 de julio de 2025, cuando la Luna presentaba una lunación de 7,45 días y una iluminación del 50,9%. En este momento, el terminador revela con gran detalle los relieves y estructuras de algunos de los cráteres más emblemáticos de la región suroriental lunar.

Equipo utilizado
Telescopio: Celestron C8-A XLT con Barlow x2 (aumento efectivo y excelente resolución)
Cámara: Player One Mars-C (especializada en astrofotografía planetaria y lunar)
Procesado: 6470 fotogramas apilados y tratados con AutoStakkert, AstroSurface y Photoshop

Cráteres destacados en la imagen
Entre los cráteres más notables está Hipparchus, una formación pre-nectárica de 151 km de diámetro y 4659 metros de altura. Este cráter, aunque de bordes erosionados y suelo plano, es famoso tanto por su tamaño como por su historia, ya que lleva el nombre del astrónomo griego Hiparco, conocido por dividir el círculo en 360° y descubrir la precesión de los equinoccios.

Otro cráter destacado es Albategnius, de 136 km de diámetro y 3511 metros de altura, perteneciente al periodo nectárico. Se trata de una gran llanura amurallada con montañas centrales y suelos planos, parcialmente cubierta por eyecciones del periodo Imbriano. Su nombre honra a Muhammad ibn al-Battani, astrónomo árabe que mejoró las tablas astronómicas y midió la oblicuidad de la eclíptica.

Vogel y Argelander son cráteres más pequeños, de 27 y 35 km de diámetro respectivamente, ambos del periodo Imbriano. Vogel es conocido por su suelo de lava y su alineación con Argelander y Airy, mientras que Argelander destaca por sus paredes en terrazas y un pequeño pico central. Ambos llevan los nombres de astrónomos alemanes pioneros en la astrofísica y la catalogación estelar.

Otros cráteres presentes en la imagen, como Donati, Lade y Saunder, son de menor tamaño, pero contribuyen a la riqueza geológica de la región. Finalmente, Triesnecker, de 27 km de diámetro y 2749 metros de altura, es célebre por el sistema de rimas que lo rodea, un conjunto de grietas y canales que lo convierten en un objeto de especial interés para los observadores lunares.

Condiciones de observación
La fase lunar y la baja altura solar realzaron los relieves, permitiendo apreciar detalles como terrazas, picos centrales y sistemas de rimas. El uso del Celestron C8-A XLT con Barlow x2 y la cámara Player One Mars-C fue crucial para capturar la nitidez y contraste de la escena, mostrando la riqueza geológica de la superficie lunar en pleno cuarto creciente.

Esta imagen y su análisis son un testimonio de cómo la tecnología amateur actual permite explorar y documentar la Luna con calidad casi profesional, acercándonos a la historia y la ciencia de nuestro satélite natural.